sábado, 19 de noviembre de 2011

Despertares vespertinos

"...Hoy voy a decirlo: ¡cómo me amo! Y tú ya no puedes hacerme daño. Soy un ser divino, ven a adorarme. ¡Qué buena suerte amarme tanto!..."

Buenos días a todos!! Hoy el despertador ha sonado para despertarme de la siesta, una siesta como las que a mi me gustan, siestas de pijama. Y ha sonado a ritmo de Balmes. Desde el Jueves estoy de puente, y estos días he llegado a casa más tarde que cuando el despertador suena. Pero hoy, para poder continuar con la parranda he necesitado poner un despertador para el sueño vespertino. Y como siempre, al escucharlo sonar, me han pasado ciertas cosas por la cabeza...

Y es que hoy os quiero contar un cambio en mi actitud, algo que no he buscado, pero que, como casi todas las cosas en esta vida, vienen cuando tienen que venir. Me di cuenta de esto cuando el viernes a las 12, con la ropa de el día anterior, olor a "ponche" (como diría mi abuela), cigarro en boca y blackberry con los cascos conectados me dispuse a bajar de plaza de toros a mi casa. Ese fue el momento en el que en mi cara se dibujó una sonrisa. Si amigos, para el que todavía no se ha dado cuenta estoy hablando de un affaire (me pongo fino, que después los míos me regañan). Esto no es lo importante. Lo importante es que bajando por la calle me di cuenta de que había sabido reirme de mi vida, había superado mi pasado, había recuperado mi autoestima, había abandonado mis complejos, había vuelto a sonreir, había vuelto a vivir, a sentirme vivo.
Se que siempre que he tenido ruptura, no he tenido escrúpulos para ahogar mis penas en amor de despecho. Pero esta vez ha sido diferente, supongo que alguna parte de mi sabía que esto es para siempre, y me impedía relacionarme con nadie.

Y es que San Alberto siempre es especial, pero este ha sido el especial de los especiales. No he podido tener un día más completo que este. He conocido más profundamente a la gente de mi promoción, con la que me voy a ir de viaje de fin de estudios, ¡y como lo vamos a pasar! Solo deciros que muchas gracias por hacer que pasaramos este día!!!

Ahora me siento con fuerzas, con energías cargadas, y más vivo que nunca para enfrentarme a un alrededor al que le es indiferente vivir.

Hoy el blog debería llamarse: ¡Duchate que has quedado a las 11! Así que besos y buenos despertares!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario