lunes, 28 de noviembre de 2011

Buenos días porque no queda otra que despertarse...

"Y de noche, y de noche por no sentirte solo recordarás, nuestros días felices, recordarás, el sabor de mis besos. Y entenderás, en un solo momento que significa un año de amor"


Después de unos días el despertador vuelve a sonar. Realmente ha sonado, pero no le he hecho mucho caso. Mi abuelo ha tenido que hacerse experto de como parar la alarma de la BB. Y es que este finde ha sido bastante completo, he tenido de TODO. Momentos malos, momentos regulares y momentos muy malos. No hombre, también ha habido muy buenos momentos. Una feria cofrade siempre es agradable, y más si es rodeado de los tuyos. Un finde en el que los proyectos de futuro casi inmediato han cogido bastante forma... hasta el punto de sentirme algo agobiado. Y es ahora, cuando he llegado a Granada, que todo me entra en la cabeza, una cabeza que es un batiburrillo de pensamientos, un gazpacho de sentimientos y un popurrí de emociones. Intentaré expresar algunas cosas que me han pasado, o más bien la consecuencia mental que me han dejado. Y digo algunas, no todas, que sino me censuran.


Que triste me resulta el ser humano, o quizás solo me pase a mi. Me resulta vergonzoso como persona que tenga que pasar algo malo, que tengas que verle la cara a la muerte para decirle a una persona que ves todos los días cuanto la quieres. Nunca me había parado a pensar lo importante que es mi familia, y mi madre en concreto. Paraos a pensar un momento en esto. ¿Que haríais sin vuestra madre? A parte de ser la persona que me ha dado la vida, sin ella no sería la persona que soy. No tendría las inquietudes que hoy tengo, los valores que me ha inculcado, en definitiva, sería una persona totalmente diferente. Y aparte, nadie sabe escucharme como ella, nadie es capaz de darme un consejo con solo una mirada, nadie reconoce mi estado de ánimo por mi tono de voz al teléfono.
TE QUIERO, y sin ti esta familia no sería más que una mesa coja, sin circunferencia ni centro.


No me siento cómodo en la ciudad que hasta ahora había designado como mi hogar. Siento que mi periodo aquí se ha acabado, no me quedan ganas de ver la alhambra, no me impresiona la basílica de las angustias, los piononos han dejado de gustarme. Bajo agua y sin respiración estoy. Vivo en una burbuja que no quiero que nadie explote. Triste sin saber el motivo, o más bien, triste sin saber por cual de ellos. Realmente me entristece haberme desenamorado de Granada, yo la quería mucho, pero creo que ha entrado otra en mi vida...
Mañana comenzará lo que puede ser mi fin aquí, Granada, se que te olvidarás de mi cara, pero yo nunca me olvidaré de ti.

Un beso y felices despertares.

No hay comentarios:

Publicar un comentario